Andar en bicicleta es un hábito que lo acompañará toda la vida, ¡ayúdale a que lo aprenda de manera segura!
Una de las actividades favoritas de los pequeños es andar en bicicleta. Para que puedan disfrutar paseos con seguridad, enséñales la técnica adecuada para que puedan pasear con tranquilidad y por supuesto, con toda la diversión.
Elige la bicicleta ideal
Para que los niños pequeños se sientan cómodos al subirse a una bicicleta, elige una de rodada de acuerdo con su altura para que, en caso de que necesite detenerse, pueda colocar cómodamente los pies en el piso.
Incluso si le es más agradable, haz que practique con una bicicleta más pequeña de lo necesario para que lo haga con tranquilidad y si llegara a caerse, no sea de gravedad.
Técnica adecuada para andar en bicicleta
Antes de comenzar a andar, es necesario que tu pequeño aprenda a equilibrarse sobre la bicicleta. Haz que se impulse con sus propias piernas, o bien, intenta empujarlo ligeramente durante tramos de uno o dos metros para que pueda empezar a sentir el equilibrio y luego, volver a colocar los pies en el suelo.
Después, que intente poco a poco subir los pies a los pedales para empezar a impulsarse por sí mismo. Haz que practique sobre una superficie completamente plana, sin topes y sin irregularidades como piedras, tierra o plantas. Lo ideal es que sea sobre un espacio de concreto o pavimento sin inclinaciones.
Equipo de seguridad
Para que tu pequeño disfrute sus primeros paseos, haz que utilice equipo de seguridad como casco, rodilleras y coderas. Tú también te sentirás más aliviado y podrán divertirse juntos sin preocuparse por raspones o heridas.
Incluso cuando tu pequeño pueda andar en bicicleta sin ayuda, recuérdale la importancia de protegerse con estos artículos. Si tienen sus personajes favoritos de películas o caricaturas, ¡no querrá dejarlos en casa!
Crea rutas seguras
Una vez que tu pequeño se vuelva más hábil sobre la bicicleta, ¡den paseos juntos! Si sales a la calle, recuerda siempre hacerlo en las que tengan poco o nulo tránsito de coches. Si es posible, pasea en parques o plazas para que los pequeños estén lejos de los autos mientras se divierten y adquieren cada vez más confianza sobre ruedas.
En espacios donde compartan la ruta con otras personas con bicicleta, patinetas o patines, enséñales a regular su velocidad y a frenar prudentemente para evitar lastimar a otros y así mismos.