Cuando estaba en la calle, me atropellaron y me dejaron abandonada. Los rescatistas me encontraron llena de lodo, pues ya no podía moverme y tenía mi rabito muy mal debido al accidente.
Ahora ya me estoy recuperando, por eso busco una familia que me cuide y que me quiera mucho, que me pueda seguir dando los cuidados médicos que necesito, ¡a cambio de mucho amor!