Cuidar el agua implica tener en buen estado tus herramientas
Quizás hayas notado la escasez de agua que vivimos actualmente en la que, debido a las pocas lluvias que ha habido, el sistema de distribución del líquido se ha visto afectado. Es por ello que debemos tomar medidas para cuidarla y tú lo puedes lograr con pequeñas acciones, tales como el mantenimiento básico para tu cisterna, reparar fugas y no desperdiciar el agua que llega diariamente a los hogares. Sigue leyendo y descubre más sobre el tema.
Importancia de una cisterna
Cuando el abasto de agua se da de manera regular en tu domicilio, podrías no echar en falta el tener una cisterna en casa, pues la cantidad de agua en tu tinaco será suficiente para atender las necesidades básicas del hogar como el baño, lavado de trastes, manos y hasta la ropa, pero cuando se atraviesa por una crisis de agua, es cuando verdaderamente la cisterna te puede sacar de apuros.
Llenar cubetas puede no ser suficiente, por lo que sí o sí necesitarás una cisterna para estar cubierto en los días que falte el agua. Por lo general, su capacidad suele ser la de un tinaco, así que mantenerla llena te podría alcanzar hasta por una semana. Una vez dicho esto, quizás comiences a pensar en tener una cisterna -si es que no la tienes- o bien, querer cuidar la que ya tienes para que esté siempre en óptimas condiciones.
Mantenimiento básico para tu cisterna
El primer paso es mantenerla limpia, recuerda que esta agua dará abasto al interior de tu hogar, por lo que es necesario que esté limpia y, de ser posible, clorada para evitar la transmisión de bacterias y gérmenes como la salmonella y el rotavirus. Para lograrlo, cada 6 meses deberás realizar limpieza completa y desinfección, es decir, un lavado con agua, jabón y cloro.
Si lo que buscas es mantener el agua desinfectada, un hack muy fácil es que a una botella de plástico le hagas varios agujeros pequeños, luego agrega hipoclorito de calcio en trozos y sumérgela en la cisterna. Asegúrate de amarrar una cuerda a la boquilla para que te sea sencillo sacarla y reemplazar el hipoclorito cada semana.
Para lavar la cisterna, esta deberá estar vacía, por lo que te recomendamos que cierres unos días la válvula de paso. Así, mientras usas el agua, el nivel de esta irá bajando. Deja unos 15 centímetros de agua y ahora sí, ¡a limpiar! Con la mezcla de agua, cloro y un poco de jabón, talla las paredes de la cisterna; si es circular, no tendrás mayores problemas, pero si es cuadrada, presta especial atención a las esquinas, que es donde suele acumularse la suciedad y hasta moho.
Posteriormente, realiza una mezcla de cloro con agua, aplica en las paredes de la cisterna y deja reposar por al menos 30 minutos. Aclara con agua limpia. Una vez que la limpieza haya terminado, deja que la cisterna se vuelva a llenar. Además de la limpieza, deberás checar siempre que los aditamentos estén funcionando correctamente; es decir: la bomba de agua, el flotador, la varillas, etcétera. Al final, abre la salida de las tuberías hacia la casa, para que cualquier suciedad que haya quedado salga por las llaves. Recuerda captar esta agua para hacer otras labores caseras, como trapear o lavar el auto.
Por último, periódicamente revisa que la bomba de agua esté funcionando correctamente, pues estas suelen presentar fallas en en el sistema eléctrico. Si crees que este puede ser el problema, deberás acudir con un profesional que pueda revisar la bomba. Sin embargo, también puede ser que tenga fugas, que la conexión esté fallando o incluso, que haya aire en su interior, por lo que habrá que purgarla.
Como puedes ver, la limpieza y mantenimiento para tu cisterna es muy importante, pues si lo haces regular y correctamente, podrás estar seguro de tener un abasto de agua limpio y seguro para ti y tu familia. ¡Pon manos al obra!