Brinda confort y movilidad a quien más la necesita, ¡checa las características de cada una!
Contar con movilidad e independencia al hacerlo es algo que debemos garantizar a las personas mayores con las que convivimos, por ello, considera las andaderas para adultos, su variedad de características y estilos facilitarán el caminar de aquellos a quienes más queremos.
Andaderas articuladas para adultos
Este tipo de artefactos cuentan con una articulación por la mitad, es decir, en lugar de que la persona las levante para avanzar, únicamente necesita aplicar fuerza con uno de los brazos para que se accione la articulación y así desplazarse hacia adelante. Esto ayudará, además de una movilidad más fluida, a ejercitar los brazos de quien la utiliza.
Andaderas con asiento para adultos
Son ideales para los paseos largos, pues así la persona podrá descansar cómodamente. La mayoría están a una altura que impide la flexión completa de rodillas, por lo que resultará más sencillo sentarse y ponerse de pie.
Andaderas con ruedas para adultos
Las andaderas con ruedas facilitarán el caminar de la persona y lo harán más fluido al no mover los brazos o levantarla del piso. Si se trata de una persona mayor con problemas con el resto de su cuerpo o quien ha sido intervenido quirúrgicamente en las rodillas o cadera le será de gran ayuda.
Pasos a seguir antes de adquirir una andadera ortopédica:
- Revisa los materiales de construcción, en especial se debe tratar de acero inoxidable reforzado.
- Elige una de altura adecuada, pues la posición de las manos al caminar debe estar a la altura de la cadera.
- Revisa la velocidad de las ruedas con antelación para prevenir accidentes.
- Checa el peso máximo que soportan las andaderas con asiento.
- Consulta previamente con un fisioterapeuta o médico geriatra para elegir la adecuada.
¿Cómo auxiliar a una persona que requiere una andadera ortopédica?
- Haz que la persona se siente al borde de una cama o sofá con la altura suficiente para evitar que flexione profundamente las rodillas.
- Con una mano sostendrá la andadera al frente, con la otra se apoyará del borde de su asiento o de una segunda persona y, finalmente, colocará ambas manos para poder avanzar.
- Este proceso debe repetirse al volver a su asiento.