El uso de mascarillas de tela se ha vuelto más común, hazlo adecuadamente y cuídalas con estos tips
Autoridades sanitarias como la Organización Mundial de la Salud (OMS) señalan que el uso de cubrebocas es recomendable para evitar el contagio de enfermedades. Sin embargo, hay que mantenerlos en perfecto estado para maximizar su principal función. Por eso, debes conocer cómo lavar tu cubrebocas de tela.
Tip
Aunado a esta protección, debe combinarse con otras medidas preventivas como el correcto lavado de manos y desinfección de objetos de uso diario, entre otras.
Uso adecuado del cubrebocas
Antes que cualquier otra indicación, es importante resaltar que los cubrebocas se dividen en dos tipos: desechables y reutilizables. Por tanto, sólo puedes lavar los que sean reutilizables, así evitarás la propagación de bacterias, virus y suciedad.
Recuerda que para que un cubrebocas tenga una eficacia garantizada hay que usarlo correctamente: lavar tus manos antes y después de colocarlo, siempre sujetarlo por las orejeras, asegurarte de que cubra nariz y boca totalmente, tratar de no tocarlo mientras lo usas y cambiarlo en cuanto se sienta húmedo.
Al retirarlo, hazlo cuidadosamente: comienza a quitarlo por las orejeras y sin tocar la parte delantera. Si se trata de un cubrebocas desechable, colócalo inmediatamente en un recipiente cerrado y lávate las manos con un desinfectante a base de alcohol o con agua y jabón. Si es cubrebocas de tela, sigue las recomendaciones para desinfectarlo y mantenerlo limpio para ti y tu familia.
¿Cómo lavar los cubrebocas reutilizables?
Una vez más, antes de realizar cualquier procedimiento de desinfección, es importante lavar correctamente tus manos para evitar contaminar tu mascarilla, los productos que utilizarás y las superficies.
Es importante conocer el material de tu cubrebocas. Si es de tela muy fina o delgada, lo mejor es lavarlo a mano; si es un poco más grueso, puedes meterlo a la lavadora. Algunos tienen anexados instrucciones de uso y lavado o tienen una etiqueta de información, si ese es el caso, debes leer muy bien las indicaciones para evitar dañar el material o romperlo.
Una de las opciones más prácticas para lavar los cubrebocas de tela es hacerlo con agua caliente (lo más que pueda resistir la tela) y detergente de ropa y secar a la luz del sol. De esta manera evitarás que queden húmedos o con aromas desagradables.
Si deseas garantizar aún más la limpieza de tus cubrebocas, déjalos remojar en agua caliente con jabón durante 30 minutos. Después, lávalos como de costumbre y enjuágalos perfectamente.
Nunca los seques en secadora porque podrían encongerse. Siempre sécalos al sol y guárdalos en un lugar fresco, seco y de preferencia que no estén en contacto con otras prendas.
Recuerda que el uso de cubrebocas es una medida extra para tu protección. No debes dejar de lado el lavado de manos, desinfectar los objetos de uso diario, evitar las aglomeraciones y mantener una distancia de, al menos, dos metros con otras personas.
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