Descubre cómo mantener una buena higiene de manos y la importancia de usar desinfectantes
Todos los días, con las actividades que realizamos, estamos expuestos a microorganismos y bacterias que pueden provocar enfermedades. Sin embargo, tener las medidas de higiene adecuadas pueden marcar la diferencia y evitar la propagación de virus.
Lavado de manos
Para eso, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda una apropiada higiene de manos. Conoce a continuación cómo llevarla a cabo de la mejor manera.
El primer consejo es siempre optar por el lavado con agua tibia y jabón, pues aunque las manos no estén visiblemente sucias, es importante tener especial atención a los pliegues, donde pueden quedar bacterias o microorganismos. Al usar agua tibia es más facil remover la suciedad.
Se recomienda que para un lavado correcto, las manos deben frotarse con agua y jabón, después, es importante secar completamente las manos.
Desinfecta tus manos con gel
La higiene de manos es la medida más importante para evitar la transmisión de gérmenes y evitar las infecciones asociadas a la atención sanitaria. Pero en caso de no contar con agua y jabón, se recomienda el uso de geles sanitizantes, formulados a base de alcohol, ya que también ofrecen protección contra bacterias y virus.
En el mercado existen diferentes productos que pueden ayudar con la limpieza de manos y superficies. Los desinfectantes son compuestos que inhiben el crecimiento o destruyen microorganismos sobre el cuerpo.
¿Sabías que…?
Uno de los ingredientes principales de los desinfectantes, sanitizantes y antisépticos es el alcohol etílico.
El alcohol etílico más utilizado en los hogares es el de 96º (concentración a 95%, superior a 70%, cuando comienzan a ser efectivos desinfectantes), ya que puede eliminar 90% de las bacterias de la piel si se mantiene húmeda durante dos minutos.
Por esta razón, es importante considerar los productos que contengan este tipo de alcohol. Si lo deseas, también puedes formular tus propios desinfectantes, siempre y cuando tengan la concentración suficiente de alcohol como para combatir las bacterias de manos y superficies.
Además de alcohol, puedes usar productos naturales que tengas en casa, tales como sábila (aloe vera) que, gracias a su contenido de polisacáridos y compuestos antioxidantes, tiene un buen potencial bioquímico para diversas cuestiones. Es una sustancia con una textura agradable al tacto, que se absorbe muy fácilmente al aplicarla sobre la piel. Debido a su composición, al gel de aloe vera se le han atribuído propiedades antibacteriales.
El limón y otros cítricos como la naranja también pueden ser de gran ayuda para tu sanitizante casero, debido a que cuentan con una variedad de compuestos como los flavonoides y los polifenoles que les confieren propiedades antioxidantes y de defensa antibacterial, lo que ha alentado su uso como antibióticos y bioinsecticidas.
Otro de los productos que puedes utilizar es el vinagre, una sustancia derivada de la fermentación de las frutas y granos. Está formado por 5% de ácido acético y 95% agua. Aunque el porcentaje de acidez varía dependiendo del tipo de vinagre.
En el caso del vinagre blanco, debido a su contenido acético, representa un ambiente antibacteriano.
Recuerda que lo ideal es lavarse las manos inmediatamente después de entrar en contacto con objetos y superficies, como inodoros, botes de basura y animales.
También es importante hacerlo después de tocar superficies que son manipuladas con frecuencia por muchas personas, como pasamanos de escaleras, manijas de puertas, botones de ascensores y carritos de compras.
Una buena salud comienza por la higiene, sigue estos consejos ¡y vive mejor!