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La piel nos protege del mundo exterior, ¡cuídala como se merece!
La piel es un órgano que tiene la capacidad de regenerarse y mantenerse activo las 24 horas del día realizando acciones vitales para el organismo y, aunque ese es un motivo más que suficiente para consentirla, hay muchas más razones que resaltan la importancia de los cuidados para una piel saludable.
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Funciones de la piel
La piel funciona como una protección para el cuerpo, está siempre expuesta y gracias a su termorregulación, nos cuida de las inclemencias del tiempo como frío, calor, el aire y demás, actuando como un escudo para los órganos internos de posibles microorganismos. Además, ¿sabías que se regenera diariamente? Por eso es que se le deben brindar los cuidados necesarios para que puede hacerlo correctamente cada día.
Otra función de este órgano es que nos da avisos de nuestra salud física y mental, ya que si algo no anda bien en nuestro cuerpo, la piel presentará cambios notables, desde la tendencia a erizarse, productos hormigueo, picar, estirarse, sonrojarse, hasta doler, sentirse seca o tirante, etcétera. Esto se debe a los millones de receptores táctiles y terminaciones nerviosas que hay en ella.
¿Cuándo comenzar a cuidar la piel?
La edad para comenzar a cuidar la piel es relativa, pues todas las personas tienen tipos de piel diferente y, por tanto, envejecen a ritmos distintos. No obstante, al ser el órgano que está más expuesto a agentes externos, lo ideal es comenzar a cuidarla desde temprana edad. Muchos expertos coinciden en que la edad ideal es a los 25 años, aunque con la tendencia actual del skincare, podrás encontrar muchos productos diseñados especialmente para cada etapa en la que te encuentres.
Tips y cuidados para una piel saludable
Mantener la piel en perfecto estado beneficia nuestra salud, por eso es esencial que tengamos ciertos cuidados con ella, tanto si estamos fuera de casa como dentro.
- Protege la piel del sol: el sol puede ser un arma de doble filo, pues si bien aporta muchos beneficios, también la sobreexposición puede ser perjudicial. Forma el hábito de usar cremas hidratantes y además, bloqueador solar con un buen factor de protección solar, así como protección contra rayos UVA y UVB y que sea resistente al agua. Esto te ayudará a evitar quemaduras solares y la aparición de manchas.
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Usa cosméticos amigables con la piel: hoy en día puedes encontrar muchísimas opciones de cosméticos, dermocosméticos y más. Opta por los que tengan el menor porcentaje de ingredientes químicos pues, si usas maquillaje fuerte o agresivo, tu piel puede mostrar tendencia a la resequedad. ¡Los cosméticos naturales son la mejor opción!
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Exfolia regularmente: realizar una exfoliación dos veces por semana o bien, cada dos dependiendo tu tipo de piel, te ayudará a mejorar su aspecto. Sólo no lo hagas con demasiada frecuencia, ya que puede ser contraproducente y presentar irritación. Lo más recomendable es consultar con el profesional de la salud para determinar la frecuencia ideal dependiendo si tu piel es grasa, seca o mixta.
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Aliméntate correctamente: una dieta rica el antioxidantes ayudará a que tu piel luzca sana y radiante. Los antioxidantes los puedes encontrar en muchos alimentos, incluyendo frutas y verduras. Uno de los más populares es el arándano.
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Hidrata tu piel todos los días: utiliza cremas adecuadas para mantener una piel linda, pero también hidrátate desde dentro, el consumo de agua es muy importante, pues eso se refleja en una dermis elástica y saludable.
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Duerme lo suficiente: lo ideal es que puedas dormir como mínimo 8 horas diarias, de lo contrario, los efectos de no descansar bien se verán reflejados en la piel.
Comienza aplicando estos cuidados para una piel saludable y complementa tu rutina con los productos adecuados de skincare facial y corporal, ¡porque nunca es tarde para comenzar una rutina que beneficie tu salud!
