¡Disfruta la temporada con un plato de comida caliente!
A partir de octubre comienzan a bajar las temperaturas, salen a relucir los abrigos, bufandas y gorros, tratando de mantener el calor del cuerpo a como dé lugar y, aunque todos estos accesorios son de gran ayuda, hay otra manera de lograrlo, ¡y es muy deliciosa! Con estas sopas y caldos para quitarte el frío sentirás un confort instantáneo que te ayudará a sentirte mejor durante la temporada, e incluso si pasas por un resfriado, estas recetas son una gran opción.
Un clásico que no puede faltar: ¡Caldo de pollo!
El caldo de pollo se sirve en cualquier época del año, para un evento familiar o para la comida del día a día. Suele ser la base de muchas otras recetas y es especialmente útil para combatir el frío, el resfriado o una enfermedad gastrointestinal. Así que no esperes más y sigue esta receta, tú eliges si agregas un poco de pasta, arroz o simplemente verduras.
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Nutritiva y llenadora: sopa de lentejas
Esta preparación, además de ser muy rica, tiene grandes beneficios para la salud, pues las lentejas son una leguminosa que aporta hierro que previene la anemia, fibra que ayuda a disminuir los niveles de colesterol en la sangre y mejora la digestión, son bajas en grasa y contienen vitaminas, minerales y proteínas. Disfrútalas en una sopita caliente y consiente a tu cuerpo.
¡Prepárala hoy!
Fácil de hacer: sopa de verduras
Esta sopa tiene todo el poder de las verduras: vitaminas, minerales, ácido fólico, potasio, fibra y es baja en calorías, por lo que es una excelente opción para cuando estás practicando algún deporte. La sopa clásica lleva papa, zanahoria y calabacita, pero tú puedes incluir tu verdura favorita como elote, col picada, chícharos, brócoli, chayote, etcétera.
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La internacional: sopa minestrone
Directo desde Italia, la sopa minestrone es una mezcla de verduras, pasta y un toque casero para calentar los días más fríos del invierno. Al usar ingredientes de temporada, la receta original puede variar, pero es tan versátil, que seguro con los elementos que tengas a la mano puede quedar muy bien, por ejemplo, al reemplazar las judías con algún otro tipo de frijol.
¡Disfrútala!
