Conoce los diferentes tipos de baterías recargables y los beneficios que te ofrecen

Estamos en una era en la que para mantenernos conectados es prácticamente una necesidad contar con aparatos electrónicos, por lo que quedarnos sin batería puede convertirse en toda una tragedia. Para nuestra fortuna, hoy en día existen opciones que nos permiten mantener estos gadgets en funcionamiento sin necesidad de comprar pilas constantemente: las baterías recargables. 

Beneficios de las baterías recargables 

Este tipo de pilas destacan por su capacidad de recargarse varias veces, a diferencia de las convencionales cuya vida útil termina en el momento en el que dejan de generar energía. Sus principales ventajas son: 

• Eficiencia. Para los consumidores que usan pilas para cámaras digitales, reproductores MP3 y otros aparatos electrónicos, que son dispositivos de muy alto consumo de energía, estas baterías pueden durar hasta cinco veces más que las desechables. 
• Menor impacto ambiental. Cuando las pilas desechables se tiran, acaban en los vertederos y liberan los productos químicos peligrosos y tóxicos en el medio ambiente. Debido a que las baterías recargables se pueden reutilizar cientos de veces en lugar de una sola vez y luego se desechan, el impacto y los residuos sobre el medio ambiente se ve muy disminuido. 
• Carga rápida y excelente rendimiento. Este tipo de batería tiende a cargarse con bastante rapidez, incluso si no se ha usado durante un largo periodo. La mayoría pueden ser recargadas a bajas temperaturas y también pueden proporcionar un buen rendimiento a temperaturas inferiores a la media. 

Tipos de baterías recargables 

Las baterías recargables se presentan en diferentes tamaños y emplean diferentes combinaciones de productos químicos: 

Baterías recargables de NiCd (níquel-cadmio): Fueron las primeras en aparecer y son las más accesibles. Suelen tener menor capacidad de carga, así que hay que cargarlas más a menudo que las otras; además ofrecen menos tiempo de vida útil, pues sólo permiten de 400 a 500 recargas. 

Baterías recargables de NiMH (níquel-metal hidruro): Son el tipo de pilas recargables más utilizado actualmente. Ofrecen mayor capacidad de carga, más tiempo de vida útil y soportan hasta mil recargas, el doble que las baterías recargables de NiCd. 

Baterías de Li-Ion (iones de litio): Poseen aún más capacidad que las de NiMH. Son las más ventajosas porque tienen el mayor tiempo de vida útil y la mayor capacidad de carga, lo que las hace un poco más caras. De hecho, es difícil encontrar pilas recargables de Li-Ion en los formatos AA y AAA. 

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