La sangre de México emana de los agaves azules, ¡adéntrate a su historia!
El tequila es por excelencia, la bebida endémica más conocida de México. Creada a partir del agave azul, este destilado ha ganado tal fama que existe el Día Internacional del tequila. Su consumo, además de ser parte de las celebraciones patrias, forma parte de dulces, cocteles e incluso algunos platillos.
¡Conoce la historia que rodea esta bebida!
Origen del tequila

Esta bebida, cuyo origen es la del mosto fermentado obtenido a partir del corazón del agave azul, comenzó a ser producida durante el siglo XVI durante la época de la colonia.
Tiene cercanía con el mezcal debido al proceso de fermentación y destilado, su diferencia radica en el tipo de agave del cual ambos son obtenidos. Con el paso del tiempo, este destilado fue creciendo en Tequila, Jalisco, y es hasta el siglo XX que los productores locales deciden promocionarlo como una bebida nacional.
¿Sabías que el tequila posee el reconocimeinto de la UNESCO?
Debido al impacto cultural que posee esta bebida, esta institución la declaró Patrimonio Cultural de la Humanidad y se celebra el Día Internacional del tequila cada 24 de julio desde el 2006.
Tipos de tequila

Por su proceso de destilado y maduración, se le puede clasificar en:
- Blanco: este tequila está recién fermentado, su sabor es intenso y contiene un mayor grado de alcohol.
- Joven u oro. La mezcla de tequila blanco y reposado da este resultado.
- Un tequila que debe permanecer al menos dos meses en barricas de madera de roble o encino.
- Añejo. Su proceso de maduración es de por lo menos, un año en barricas de madera de roble o encino. Este a su vez, también se puede encontrar como tequila cristalino, es un destilado que pasa por un proceso de filtración para darle ese tono claro. A diferencia del tequila blanco, este tendrá notas amaderadas más claras y un menor grado de alcohol.
- Extra añejo. Un tequila con mayor maduración en barricas, de al menos, tres años.