La temporada de calor está por comenzar: protege a tu pequeño y sigue estas recomendaciones para evitarles un golpe de calor
Con la llegada de la primavera es normal que la temperatura comience a elevarse desde muy temprano. Si tienes un bebé en casa, toma en cuenta estos consejos para disfrutar el clima sin peligro para ellos.
¿Cómo saber si un bebé tiene calor?
Debido a su poca convivencia con los cambios bruscos de temperatura, su sistema aún no sabe cómo autorregularse adecuadamente. Pon atención a las señales que podría tener tu bebé ante calor excesivo:
- Sudoración en la espalda, la nuca y la frente.
- Coloración excesiva en las mejillas.
- Molestia, irritabilidad y dificultad para dormir.
- Aumento en su petición de líquidos.
Si estas señales no son atendidas a tiempo, es posible que los bebés presenten un golpe de calor, lo cual puede ser peligroso ya que podría deshidratarse.
Evita golpes de calor con estos tips
- Para que tu bebé se encuentre fresco en todo momento, ponle ropa adecuada: ligera, de tela de algodón y colores claros.
- En la medida de lo posible, evita salir entre las 11 y las 17 horas. Si lo haces, no lo expongas al sol directo.
- En el exterior puedes aligerar el calor con toallitas húmedas en su frente o brazos.
- Para transportarlo, evita las mochilas portabebés ya que generan calor extra y lo afectará más rápidamente. Elige una carriola adecuada para su edad y tamaño.
- Si es pequeño (menor a 6 meses) la lactancia aliviará su sed. Siendo mayor, puedes llevarle en un biberón un poco de agua fresca (de 4 a 6 onzas).
- Si viajas en coche, antes de introducir al bebé al automóvil, asegúrate de que el aire acondicionado esté a una temperatura adecuada.
- Dentro de casa, evita que su cuna esté cerca de puertas y ventanas, siempre lejos de los rayos directos del sol.
- Báñalo con agua templada (sin llegar a estar fría); después de eso, evita exponerlo de nuevo a la intemperie.
- No utilices ventiladores o aire acondicionado en la habitación en la que se encuentre descansando.
- Si es necesario, ventila previamente la habitación y vigila con un monitor el descanso de tu pequeño.
Cómo saber si tu bebé tiene calor, es esencial para determinar (y evitar) en la medida de lo posible, un golpe de calor. Cuídalo con especial atención ante los cambios bruscos de temperatura y recuerda siempre consultar tus dudas con su pediatra.