Atiende las necesidades de tu mascota y cuida tu hogar
Tener una mascota en casa es un privilegio y además, una gran responsabilidad. Después de todo, ¿qué seríamos sin nuestros amiguitos peludos que tanta paz y armonía nos brindan día a día? Así que si tú en casa tienes uno o varios gatos y has notado que están rasguñando los muebles últimamente, trata de entenderlos. Aquí te contamos por qué lo hacen y cómo evitarlo. ¡Toma nota!
¿Por qué el gato araña los muebles?
Queda claro que nadie es fanático de ver dañados nuestros muebles favoritos, pero precisamente por ello es importante entender que los gatos, como felinos que son, tienen algunos instintos que deben atender. Si te preguntas por qué rasguñan tus sofás mesas o colchones, es debido a su necesidad por mantener afiladas sus uñas, que al final del día, son su arma principal para cazar.
Claro, sabemos que tú les das sus croquetas, ¡pero se trata de un rasgo evolutivo que tu gato lleva miles de años practicando! Si a eso añades que al afilar depuran algunas capas muertas de tejido de sus garritas, lo entiendes todo.
Cómo hacer para que el gato no arañe los muebles
Tu gatito seguirá buscando la forma de afilar sus garritas sin importar dónde o cómo, así que para que no lo haga sobre tus muebles, cortinas o tapicería, dale un lugar específico que logre satisfacer su necesidad de rasguñar. Si tienes un jardín en casa con algún árbol, ya habrás notado que le encanta pasar tiempo allí, trepando, descansando y sí, rasguñando. ¡Su superficie rugosa es perfecta para ello!
Sabemos que no todos tenemos espacios verdes en el hogar, así que si tu felino es hogareño al 100%, ¡entonces te complacerá saber de la existencia de varios juguetes que están diseñados especialmente con este propósito!
Empatía, observación e inteligencia
La mejor manera de ayudar a resguardar el buen estado de tu hogar y, a la vez, mantener la salud de tu gato es partir de la paciencia. Observa con cuidado a qué tipo de materiales se siente más atraído y busca ofrecerle juguetes que se acerquen mucho a estos. Existen diferentes materiales que incluso pueden cubrir tus muebles y mantenerlos a salvo mientras se acostumbra a los juguetes que elijas para él.
Incluso, hay quienes prefieren darle algunas cobijas o sábanas viejas para que jueguen con ellas y puedan afilar sus uñas. Procura poner tu inteligencia en colocar estratégicamente diferentes tipos de rascadores para que se sienta siempre motivado a entretenerse mediante distintos tipos de estímulos. Entre menos opciones, más curiosidad podrá tener tu mascota.
Educar a tu gato es un proceso que puede llevar algo de tiempo, pero con amor y trabajo, rendirá valiosos frutos. No le grites o hagas sentirse mal, sólo sé firme y demuéstrale dónde sí y dónde no debe rascar. Repite el proceso de cómo le enseñaste a hacer en el arenero o de dónde podía tomar su comida. Recuerda que confía en ti.
