Las frutas y verduras congeladas te pueden sacar de un apuro en la cocina, conoce cómo conservarlas con esta guía
En temporadas de mucho calor o en situaciones en que comprar frutas y vegetales a diario es poco viable, el método de congelación es una buena alternativa para conservar por más tiempo tus alimentos. Saber cómo congelar frutas y verduras te ayuda a aprovechar más su valor nutritivo ¡y ahorrar sin desperdiciar!
Frutas y verduras que se pueden congelar
Elige frutas sin magulladuras y maduras, pero no tanto como para que se sientan demasiado suaves. Antes de meterlas al congelador, lávalas en agua fría (de ser necesario, desinféctalas) y sécalas perfectamente.
Hay frutas que deben madurar naturalmente antes de congelarlas, como mangos, duraznos o ciruelas. Los frutos rojos se pueden congelar desde el momento en que se adquieren.
Por su parte, las verduras y hortalizas para congelar deben ser las más frescas y en su mejor punto de maduración. Puedes cortarlas o quitarles la cáscara, según el uso que les darás posteriormente. Si congelarás frutas o verduras picadas, quítales las semillas y huesos.
Antes de congelar las verduras, es muy importante escaldarlas. Esto ayuda a detener su maduración, remueve microorganismos, reduce la pérdida de nutrientes y las suaviza para el momento de comerlas o cocinarlas.
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Escaldar verduras para congelar significa calentarlas en agua hirviendo y enfriarlas de golpe en agua congelada. Para eso, calienta agua en una cacerola grande. Cuando esté en ebullición, agrega las verduras. Espera a que el agua retome su hervor y, a partir de ahí, calienta tus verduras aproximadamente dos minutos. Retíralas de la cacerola con un colador e inmediatamente después sumérgelas en un recipiente con agua helada hasta que se enfríen por completo. Escúrrelas perfectamente.
¿Sabías que…?
Frutas y verduras congeladas pierden un poco de su valor nutricional, pero a una velocidad menor a refrigerarlas o dejarlas a temperatura ambiente.
Recipientes para congelar frutos y vegetales
Para evitar que su sabor se torne rancio al contacto con el aire, utiliza recipientes a prueba de humedad y vapor, como contenedores de vidrio o metálicos, o bolsas resellables y herméticas.
Si metes tus frutas y verduras en bolsas hereméticas, sácales todo el aire que te sea posible y etiquétalas con la fecha en que las meterás a congelación.
Además, almacénalos hasta el fondo de tu congelador, para evitar los cambios de temperatura cada vez que lo abres.
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Descongelar y volver a congelar
Al descongelar no sólo ocurren cambios en la textura, sabor y aroma de las frutas y verduras. Cuando se incrementa su temperatura, pueden reproducirse en ellas microorganismos causantes de enfermedades gastrointestinales. Lo mejor es descongelar sólo las porciones que se consumirán en ese momento.
Frutas y verduras que NO se deben congelar
- Frutas con alto contenido de agua: sandía o melón
- Plátano (a menos que lo prepares en un smoothie o postre)
- Manzanas crudas
- Vegetales que consumirás crudos: apio, rábano o jitomate
- Vegetales de hojas verdes: lechuga o espinaca
- Jitomate y tomate
- Papa
- Alcachofa
- Berenjena
- Col
- Rábano
Finalmente, debes conocer cuánto dura la fruta congelada, así como los vegetales, para que los consideres al planear tus menús. Si se trata de cítricos, pueden pasar hasta 3 meses congelados. El resto de las frutas y verduras duran de 8 a 12 meses en congelación.