¡Son perfectos para la hora del postre!
Los mochis son un postre japonés que, aunque no pueden faltar en año nuevo, se pueden comer durante todo el año. Gracias a su sabor y presentación, han trascendido a todo el mundo. Ahora, es momento de que tú aprendas a prepararlos en casa, ¡y si los haces con los pequeños del hogar, mucho mejor! Podrán divertirse y saborearlos en cualquier ocasión.
Arroz para el postre
Los mochis están elaborados con harina de arroz, por lo que su consistencia resulta un poco elástica y es perfecta para rellenarla de diferentes sabores.
- ¿Sabías que...?
El sabor original de los mochis es té verde y judía roja, pero cuando la receta llegó a otros lugares del mundo, se modificó para incluir sabores como fresa, chocolate, etc.
Ingredientes
15 porciones
- 450 g de harina de arroz
- 400 ml de agua
- 2 cucharadas de azúcar
- Fécula de maíz
- Colorantes comestibles
- Crema de avellanas
- Mermelada
- Fruta picada
Preparación
- En un bowl mezcla la harina de arroz con el azúcar.
- Añade poco a poco el agua mientras sigues revolviendo, hasta que quede una masa homogénea y sin grumos.
- Tapa la mezcla con plástico y mete al microondas por dos minutos, esto es para que la masa tome un poco de textura y sea más fácil manipularla.
- Una vez salido del microondas, sigue amasando hasta que la consistencia sea dura y elástica. Repite el proceso: cubre con plástico y vuelve a meter al horno por 2 minutos, para después, volver a amasarla. Debes hacer el procedimiento hasta que la superficie de la masa tome un tono brillante, este es el momento en que la masa está en su punto.
- Agrega un poco de fécula de maíz y comienza a amasar por última vez.
- Separa la masa en distintos recipientes y a cada uno agrega unas gotas del colorante que hayas elegido. Mezcla muy bien para que el color se integre y quede parejo.
- Divide la masa en 15 porciones redondas, aplana con ayuda de un rodillo sin que quede muy delgada y agrega tu relleno favorito, como crema de avellana, fruta picada o mermelada. Cierra la masa y moldea hasta que quede una bolita bien definida.
- Coloca tus mochis en una charola y espolvorea con un poco de fécula de maíz, para que no se peguen entre sí. ¡A disfrutar!
- Tip
Dale un giro inesperado a tus mochis, preparándolos con harina de almendra o de coco.