¡Disfruta un hogar lleno de naturaleza!
Quizás siempre has sido un amante de las plantas en el hogar o, con el paso del tiempo, le has agarrado gusto a tenerlas en casa, convirtiéndolo casi en un hobbie, así que ahora disfrutas tener variedad de flora en tus estancias favoritas del hogar pero, en ocasiones, pueden perder vida y lucir decaídas, pues también son seres vivos. Sigue leyendo y da vitalidad a tus plantas con los consejos que te daremos.
¿De sol o de sombra?
Lo primero es conocer tus plantas, si son de sol o de sombra, pues con base en ello sabrás cada cuánto debes regarlas, el espacio idóneo para ellas y también, si son las ideales para tu hogar.
Una vez que lo sepas, podrás acomodarlas en el interior, cerca de una ventada donde les dé la luz directa del sol, donde no les dé mucha luz, en el balcón o escaleras e incluso, en un pequeño huerto en casa.
Busca la maceta adecuada
Cada planta crece a un ritmo diferente, por eso debes estar al pendiente de su crecimiento para que le puedas proporcionar una maceta adecuada y le permita seguir creciendo. Si la maceta que tiene es muy pequeña, esto hará que tu planta pierda fuerza y termine secándose. Mantente al pendiente de este aspecto y, cuando sea necesario, realiza un trasplante de maceta, hay algunas que incluso pueden funcionar como complemento de tu decoración.
La temporada ideal para trasplantar es en primavera, pues la temperatura ayudará a tus brotes a habituarse más rápido. Asimismo, no debes regarlos en 4 o 5 días, para que las raíces comiencen a afianzarse al nuevo sustrato.
Riega siempre a la misma hora
Independientemente del lapso de riego para cada planta, asegúrate de hacerlo por la mañana o por la noche, ya que si lo haces al medio día o cuando el rayo del sol es muy fuerte, lo único que sucederá es que el agua se evaporará rápidamente, evitando que la planta obtenga los beneficios, incluso, podría quemarse por las altas temperaturas del sol.
Tus macetas deben contar con orificios de drenaje, en primer lugar para que el agua no se quede estancada y en segundo, para que te asegures de que el agua está alcanzando las raíces de la planta.
Si no sabes cada cuánto regar tus plantas, este tip puede servirte: inserta en la tierra de la maceta un palito de madera, si sale seco, tu planta necesita agua. Procura echar agua solamente en el sustrato, no así en las hojas, ya que podrían desarrollar hongo. Si deseas darle brillo y vitalidad a las hojas, entonces mezcla una parte de agua y una de limón, humedece un paño y limpia las hojas de tus plantas, esto lo puedes llevar a cabo cada 6 meses.
Dale el mantenimiento adecuado
Una vez a la semana, con ayuda de una palita remueve la tierra de la superficie, esto para evitar que se compacte y se haga dura, ya que esto evitará que el agua llegue hasta las raíces de tus plantas, solo no lo hagas muy fuerte, para evitar lastimarlas. Asimismo, pódalas periódicamente con ayuda de unas tijeras curvas, eliminando las hojas secas o amarillentas.
Evita la plaga
Cada que riegues o le des mantenimiento a tus plantas, revísalas para cerciorarte que no tienen plaga, como hongos o insectos. Si detectas alguno de estos, entonces puedes aplicar algún insecticida o hacer el tuyo en casa: hierve una cabeza de ajos en un litro de agua, déjalos enfriar y después diluye 250 ml de esta agua, en un litro de agua fría. Vacíalo en un atomizador y rocía tus plantas cada 15 días. Después de aplicarlo, deja reposar por 5 o 10 minutos y después sécalas con un paño húmedo.
¡No olvides el abono!
Sin importar el tipo de planta que sea, el abono nunca estará de más, ya que las fórmulas contienen nutrientes que les ayudarán a crecer sanas y fuertes. Aplica un poco sobre el sustrato y riega para que las raíces puedan absorberlo. Podrás encontrar de varios tipos, dependiendo el tipo de planta en la que quieras aplicarlo.
