Encuentra en estos platillos opciones para alimentar a tu bebé de forma saludable
Los pequeños crecen aceleradamente durante sus primeros años de vida, por ello es necesario brindarles una alimentación integral que les permita crecer de manera óptima. Si aún no sabes qué cosas pueden comer, aquí te presentamos recetas de comida para niños de 1 año. Descubrirás que son fáciles de preparar y que tendrás más de una opción para brindarle cada día.
Desayuno para bebés
Dependerá de ti y el seguimiento del pediatra decidir si aún continuarás amamantando al bebé o si su desayuno consistirá únicamente en nuevos alimentos. De ser así, puedes darle un poco de leche de vaca (unos 125 ml) acompañada de avena con manzana o yogur con fruta picada (en trocitos muy pequeños, casi en puré).
A media mañana puedes darle un pequeño refrigerio como fruta o papillas de verduras.
Comida para niños de 1 año
Durante la hora de la comida, puedes darle a tu pequeño alimentos diferentes como sopa de verdura con un poco de pechuga de pollo hervida y desmenuzada; complementar con arroz o preparar caldo de pollo y brindarle el sabor en conjunto.
Otra opción son unas tortitas de calabacita o sopa de lentejas en compañía de carne de res hervida y machacada, condimentada con una pizquita de sal. Varía las proteínas (pescado, carne de res o cerdo, pollo o pavo) siempre y cuando su cocción sea ideal para ser masticada por tu bebé. Puedes recurrir a un procesador de alimentos en caso de que la textura sea muy rígida.
Como postre puedes darle un poco de fruta, helado casero sin azúcar añadido o un muffin casero de plátano.
Si las actividades de tu pequeño hacen que sienta hambre antes de la cena, un poco de fruta o yogur serán una buena opción.
Cena para bebés
Una vez que ha caído la noche, ¡tu bebé querrá cenar! Un omelette de verduras o un poco de consomé de verduras serán buena opción para una cena ligera. Si quieres, también puedes darle una porción pequeña de pechuga asada en compañía de una ensalada verde.
Por último, nada como un poco de leche tibia (que te haya recomendado el pediatra) para garantizar un descanso profundo durante el máximo de horas posibles.
Toma en cuenta estas opciones para crear un menú variado que le proporcione mayor conocimiento de las frutas y verduras que puede consumir y que vaya ampliando así su gusto por ellas. Procura no condimentar demasiado los alimentos para que los pruebe tal cual son.
Considera la edad de tu bebé y qué tantos dientes le han salido para ir innovando en otros alimentos de mayor consistencia y mantén al pediatra siempre al tanto de estos progresos.
