Obtén con un cortapastas, o con alguna tapa, un círculo de cada rebanada de pan y del queso crema.
Coloca en una tabla de cocina los círculos de pan, pon encima el queso crema y un poco de mermelada de fresa. Tapa con otro círculo de pan y sella las orillas con un tenedor.
Barniza las empanaditas con mantequilla fundida.
Dóralas en una tostadora y ¡directo a la lonchera!
Acompaña con:
Un jugo de durazno, uvas y una natilla de vainilla.